Puede que fuera una noticia que pasara desapercibida para muchos de vosotros, pero dentro de las directrices marcadas en la Agenda Digital Europea hubo una que llamó especialmente mi atención. Se trata de la obligación de que antes del año 2020 cualquier ciudadano de la UE por obligación deba disponer de acceso a Internet con un mínimo de 30 Mbps. Y no solo eso si no que el 50% de la población debe tener la posibilidad de que dicho acceso sea a 100 Mbps.

Huelga decir lo lejos que, por lo menos en nuestro país, estamos de esa directriz, ¿no? Pues ante ello está claro que los operadores deben posicionarse para cubrir dichas necesidades. Hasta la fecha más del 70% de los accesos a internet en España estaban basados en par de cobre. Se trata de un medio que nos ha dado tremendas alegrías, pero que sinceramente hemos llevado hasta su límite. Como podremos comprobar más adelante eso no significa que debamos arrancar de cuajo los kms y kms de cobre que tanto trabajo y dinero ha costado tender, ni mucho menos. Pero sí que nos debe hacer reflexionar acerca de las tecnologías de acceso que deben adoptar los proveedores de servicio para cubrir las necesidades comentados. 

GPON, el futuro de los operadores

A nivel de tecnología y dados los niveles de capacidad y capilaridad requeridos por las directrices que hemos comentado con anterioridad parece que una tecnología se posiciona como el futuro de este tipo de redes. Hablamos de las redes GPON (Gigabit Passive Optical Network). Los estándares ITU-T G.984.1/2/3/4 definen los diferentes parámetros de este tipo de redes y los podéis consultar en detalle si os apetece (ITU-T G.984.1, ITU-T G.984.2, ITU-T G.984.3, ITU-T G.984.4). Por mi parte para evitaros leer todo ese amasijo de letras y números os facilito las principales características recogidas en los mismos:

[list type="icon-arrow"]
  • Capacidad: 2,488 Gbps (downstream) / 1,244 Gbps (upstream)
  • Distancia máxima (lógica): 60 km
  • Distancia máxima (física): 20 km
  • Ratio de splitting: 1:128
[/list]

Una vez vistos por encima los datos numéricos vamos a analizar qué son estas redes. Las redes GPON son redes ópticas que destacan principalmente por dos características, por un lado toda la infraestructura extremo a extremo está basada en elementos ópticos pasivos (básicamente splitters) y por otro permiten la transmisión y recepción de datos a través de una sola fibra.

Pues no sé si a vosotros os pasará lo mismo, pero a mí personalmente lo primero que me llamó mucho la atención en este tipo de redes es saber cómo podíamos simplemente con elementos pasivos encaminar el tráfico desde nuestra central hasta cada usuario.

Pues la respuesta es tan sencilla como obvia, ese control no lo llevamos más que en la parte de usuario. Es decir el tráfico se envía a la red a través de broadcast de forma que todos los usuarios reciben la misma información pero sólo podrán tener acceso a la parte que le corresponde en base al registro asociado a su equipo de abonado.

Para entender la estructura de una red GPON os propongo un esquema en el que se recogen los diferentes elementos que definen la red:

Veamos qué función realiza cada uno de los elementos recogidos en el esquema.

OLT (Optical Line Terminal)

El OLT es el equipo de cabecera, por realizar una analogía realizaría las funciones que el DSLAM realiza en una red de cobre. Estos equipos conectan la red del operador con la red GPON y normalmente se ofrecen en un formato modular que permiten la adecuación a los diferentes escenarios existentes. De esta manera podremos disponer de puertos para conexión de uplink tanto eléctricos como ópticos y puertos de acceso que al margen de los puertos GPON que son lo que nos interesan hoy puede ofrecer alternativas basadas en cobre como VDSL2 o ADSL2+. Es por ello que es bastante habitual encontrar referencias a los OLT como MSAN (Multi Service Access Node).

ODN (Optical Distribution Network)

Suele referirse a la ODN como los diferentes elementos ópticos existentes entre la OLT y las diferentes ONTs/ONUs de la red GPON. Suele estar compuesto de las diferentes fibras ópticas y de los splitters requeridos para diversificar la red. Es muy importante notar que como hemos comentado antes sólo está compuesta por elementos pasivos con el consecuente ahorro de mantenimiento que ello conlleva.

ONU (Optical Network Unit)

La ONU es uno de los elementos que pueden registrarse contra una OLT. En este caso se trata de dispositivos de distribución que dan servicio a más de un usuario. Por un lado ofrece conectividad GPON para la interconexión con la OLT y por otro dispone de diferentes tecnologías para dotar de servicio a los usuarios. Habitualmente suelen ofrecerse con la posibilidad de emplear VDSL2, ADSL2+, Fast Ethernet y POTS.

ONT (Optical Network Terminal)

La ONT es a una red GPON lo que un módem es a una red xDSL. Se trata del equipo que ofrecerá el servicio al usuario y que conectará directamente con la OLT. Tal y como ocurre con las soluciones de cable de cobre se ofrecen diferentes alternativas en base al número de puertos, interfaces WiFi, conexiones CATV,…

De todos estos elementos existen diferentes fabricantes normalmente asociados al mercado carrier en otro tipo de soluciones como DSLAMs, redes RAN o electrónica de red. Entre los más importantes se encuentran Huawei, Ericsson, Alcatel-Lucent, ZTE o Motorola.

Como hemos podido ver las redes GPON ofrecen una alternativa muy interesante para que los proveedores de servicio puedan adaptar sus infrestructuras a las nuevas y crecientes necesidades y a las exigencias de la Agenda Digital Europea. De momento hemos podido revisar de forma superficial las principales características de estas redes y los elementos que la componen. En otro artículo discutiremos las diferentes arquitecturas basadas en redes GPON que podremos contemplar y cómo las mismas pueden ayudar a afrontar los diferentes tipos de escenarios.